miércoles, 8 de octubre de 2008

LOS DESCONOCIDOS POR CONOCERSE


Cierto día iba caminando un presidente más picado que muela de gamín por una cancha de fútbol más grande que una ciudad entera, iba con un sombrero voltiao que le cabía en su billetera y cargaba un canasto de mercado más pesado que un camión, de pronto se le acerca un jugador de basketball más alto que el trampolín de una piscina y dice:
-“Uy ese presidente es más ordinario que un desodorante de cebolla”- en ese momento paso una reina con más maquillaje que un payaso y le robo un cuadro tan pequeño como el tamaño de una hormiga, y viendo este suceso el presidente agregó: -“no, no, no esa vieja es más inoportuna que un cuentachistes en un velorio”-.
Luego de lo sucedido en aquella extraña cancha de fútbol decidieron irse a almorzar a un restaurante que quedaba más lejos que la misma china, y no pensaron como mala idea el podersen conocer luego de haber vivido un día tan agitado como un tornado. Comieron hasta para saciar su hambre por unos cuantos meses y se volvieron muy amigos, tan amigos que parecían chicles, así concluye la corta historia de unos desconocidos que al final se volvieron más íntimos que la misma ropa interior........................
FIN